Ahorrar energía en casa de manera fácil y barata
01 NOVIEMBRE DE 2023
Podemos llevar a cabo pequeños cambios en nuestra rutina diaria y en la manera en que, por ejemplo, usamos nuestros electrodomésticos. Con el firme propósito de ayudarte, hoy nos hemos decidido a proponerte hasta 10 consejos prácticos y baratos para ahorrar energía en casa. Verás que ponerlos en marcha es cuestión de un simple gesto.
Las diez formas de ahorrar energía en casa de la manera más barata Estas son, para nosotros, las diez formas más baratas y efectivas de ahorrar energía en casa:
1. Sustituye tus bombillas incandescentes por LED para empezar a ahorrar energía. Las bombillas LED consumen menos energía y duran mucho más que las bombillas incandescentes. Aunque inicialmente son un poco más caras, el ahorro a largo plazo lo compensa. Según datos de la compañía Lucera, las bombillas LED pueden proporcionarnos un ahorro de hasta el 88 % frente a las bombillas de toda la vida.
2. Desconecta los dispositivos electrónicos cuando no los uses. Muchos dispositivos electrónicos consumen energía en modo de espera. Desconéctalos o utiliza regletas con interruptores para apagar varios dispositivos a la vez. Repsol tiene cuantificado el consumo denominado ‘fantasma’ entre un 7 % y un 11 % del gasto total de electricidad en los hogares españoles. Reducirlo es clave para ahorrar en la factura energética. Y es fácil: apagar o desconectar son solo un gesto.
3. Aprovecha la luz natural para ahorrar energía en casa. Abre cortinas y persianas durante el día para aprovechar la luz natural en lugar de encender luces artificiales. Es muy importante que durante el invierne aproveches las horas de sol para ganar calidez en el hogar. En cuanto caiga la tarde-noche, ciérralas. Además, puedes pintar las paredes con colores claros que reflejen la luz.
4. Ahorrar energía mejorando el aislamiento de tu hogar. Asegúrate de que tu casa esté bien aislada para evitar fugas de calor en invierno y mantenerla fresca en verano. Sellando ventanas y puertas, y agregando aislamiento en el ático y las paredes, puedes reducir significativamente tus costos de calefacción y refrigeración. Es por los puentes térmicos por donde se escapa el 30 % de la energía en el hogar.
5. Programa tu termostato para ahorrar energía en casa. Utiliza un termostato programable para ajustar automáticamente la temperatura de tu hogar cuando no estés. Reducir la temperatura en invierno y aumentarla en verano cuando no estás en casa puede generar un ahorro sustancial. Hay sistemas que incluso te permiten gestionar los sistemas de refrigeración y calefacción desde el teléfono móvil.
6. Lava la ropa con agua fría para gastar menos y ahorrar energía La mayoría de las lavadoras modernas funcionan eficientemente con agua fría. El agua caliente consume mucha más energía, por lo que lavar con agua fría puede reducir tus costes de energía y prolongar la vida útil de tu ropa.
7. Mantén los electrodomésticos en buen estado. Limpia y mantén tus electrodomésticos regularmente. Los filtros sucios y las bobinas obstruidas hacen que los electrodomésticos trabajen más para mantener la misma eficiencia. Además, te recomendamos tener programado el mantenimiento anual para tu sistema de calefacción y refrigeración.
8. Cocina de manera eficiente para ahorrar energía. Utiliza ollas y sartenes que se ajusten al tamaño de los fogones para evitar pérdidas de calor. Cuando puedas, utiliza tapas en las ollas para retener el calor y cocina con fuego lento para ahorrar energía y ser más sostenible en la cocina.
9. Pasa menos tiempo en las zonas más frías de la casa. Este consejo es básico pero efectivo. Habitualmente pasamos más tiempo en el salón, que es donde suele ser más elevada la temperatura. Economiza pasando más tiempo en la misma zona y no en espacios dispersos de la casa, donde será inevitable tener que encender otros aparatos de calefacción y, por tanto, gastar más.
10. Aprovecha la ventilación natural. En lugar de encender el aire acondicionado o el extractor de aire, abre las ventanas para permitir la circulación de aire fresco. Esto puede enfriar tu hogar en verano y reducir la necesidad de utilizar ventiladores o aire acondicionado. En invierno, ventilar también es una buena manera de renovar el aire y conseguir que la calefacción resulte más eficiente.
En resumen, ahorrar energía en casa no tiene por qué ser costoso ni complicado. Pequeños cambios en tus hábitos diarios y la forma en qué gestionas tus dispositivos y electrodomésticos pueden tener un impacto significativo en tus facturas de energía. Además, estarás contribuyendo a la conservación del medio ambiente al reducir tu huella de carbono.