Tipos de alquiler para estudiantes universitarios
Según el Ministerio de Universidades, este curso 2021-2022 será presencial con medidas extraordinarias debido al covid-19. Según las previsiones, el alquiler estudiantil volverá a moverse, ya que la Comunidad de Madrid oferta más de 85000 plazas universitarias y Cataluña más de 42000.
La Agencia Negociadora del Alquiler (ANA) explica que, con la pandemia como telón de fondo, la prioridad será la seguridad buscando viviendas menos céntricas con precio y dimensiones más adecuadas a este fin. También ha resumido en un estudio los pros y contras de las distintas modalidades de alojamiento que pueden encontrar.
Pros y contras de cada tipo de alquiler
Para el alquiler tradicional de una vivienda (regulado por la LAU):
- Pros:
- Estabilidad para toda la carrera, puesto que el contrato que firmará el estudiante se podrá prorrogar hasta cinco años si el propietario es una persona física (particular) o siete años si se trata de una persona jurídica (empresa).
- Mayor seguridad contra el covid, ya que es más fácil evitar posibles contagios con los compañeros de piso.
- Contras:
- El precio, ya que la renta también debe pagarse cuando el estudiante no esté viviendo en la casa.
Para el alquiler de temporada (regulado por la LAU):
- Pros:
- Sólo se paga por los meses de estancia, por lo que se ahorrará los meses en que no haya curso escolar.
- Mayor seguridad contra el covid, igual que ocurre en el arrendamiento de vivienda.
- Contras:
- El doble de fianza y garantía ilimitada, ya que el estudiante debe pagar dos meses de fianza, además de la cantidad económica que el propietario considere oportuno como garantía adicional
- Volver a buscar vivienda el siguiente año, puesto que el contrato de esa vivienda expira al finalizar la temporada acordada.
Para el arrendamiento de una habitación en un piso compartido (regulado por el Código Civil):